Chemdog

Chemdog: Potente, intensa y con un aroma que deja huella

La Chemdog es una variedad feminizada de dominancia índica que ha marcado un antes y un después en la historia del cannabis. Su legendaria genética, fruto del cruce entre OG Kush y Sour Diesel, da como resultado una planta de efecto demoledor y perfil terpénico inconfundible, ideal para cultivadores que buscan producción, potencia y carácter.

Una genética para los que buscan sensaciones fuertes

Con un 70% de índica y un 30% de sativa, la Chemdog combina lo mejor de ambos mundos. Su nivel de THC puede alcanzar el 24,5%, lo que la sitúa entre las variedades más potentes de su categoría. El CBD se mantiene en torno al 1,5%, aportando cierto equilibrio físico al colocón cerebral profundo que genera.

Su efecto es narcótico, duradero e intenso, con una marcada influencia sobre la percepción sensorial. Es perfecta para quienes buscan desconexión total o alivio de molestias físicas, como el dolor crónico o el insomnio.

Cultivo vigoroso con alma de OG

La estructura de Chemdog es similar a la OG Kush: una planta de tamaño medio-alto, con ramificación abundante e internudos largos, que responde muy bien a técnicas como ScrOG o LST. Su comportamiento es robusto y agradecido tanto en interior como en exterior, aunque necesita un poco de espacio para desarrollar todo su potencial.

• En interior, completa su floración en 9 semanas, con una producción generosa de hasta 800 g/m² bajo condiciones óptimas.

• En exterior, se cosecha hacia finales de octubre, y puede llegar a los 1000 g/planta, alcanzando una altura de entre 150 y 170 cm. Es recomendable mantener un nivel de EC medio-alto para maximizar su rendimiento.

Un aroma inconfundible con carácter diésel

Chemdog no pasa desapercibida en ningún sentido, y su aroma es una de las razones. En seco, desprende notas ácidas y cítricas, pero al quemarse emerge un perfil diésel, químico y terroso, que recuerda al combustible o al metal caliente. Un sabor potente, de esos que se quedan en boca y en la memoria.

Para quienes saben lo que buscan

Chemdog no es una variedad para cualquiera. Es ideal para usuarios con cierta tolerancia o para quienes buscan un cannabis medicinal de efecto contundente. Su genética, producción y potencia la convierten en una apuesta segura para cultivadores que buscan calidad, rendimiento y un perfil sensorial potente y poco común.

Opciones disponibles: Packs de 1, 3, 5 y 10 semillas feminizadas.